Así como en la navegación marítima antigua se construyeron grandes faros para guiar a los navegantes a los puertos, la aviación ha desarrollado distintos tipos de ayuda para facilitar la navegación de los pilotos de aeronaves, una de esas ayudas son los Radiofaros Omnidireccionales de muy Alta Frecuencia; VOR, por sus siglas en inglés (Very High Frequency Omnidirectional Range).

Asistencia para la navegación

Esta tecnología es una de las asistencias para que los pilotos puedan volar de un lugar a otro sin perderse. Al igual que los antiguos faros que emitían una señal de luz indicando la dirección del muelle en las noches a los navegantes de barcos; la tecnología VOR cuenta con estaciones terrestres, “radiofaros”, ubicados en cada aeropuerto y también en diferentes ubicaciones en ruta a los cuales se les llaman “fijos”, estos conforman una guía de referencias sobre los que se debe seguir la trayectoria de la aeronave hasta su punto de destino.

El funcionamiento de los VOR

Las estaciones de los radiofaros cuentan con una antena que emite una señal de radiofrecuencia VHF en todas las direcciones, de ahí el nombre “omnidireccional”, esta señal tiene un rango de alcance máximo de unos 320km de radio y una altitud de 11,430m sobre la estación terrestre VOR. La aeronave cuenta con un instrumento denominado CDI, Indicador de Desviación de Rumbo (Course Deviation Indicator), el cual determina la posición del avión en relación con la guía emitida por el radiofaro. Este instrumento es similar a una brújula, solo que, en lugar de apuntar el norte; este señala permanentemente la dirección del radiofaro emisor. El sistema VOR es utilizado para navegar con las IFR o Reglas de Vuelo Instrumental, es decir, la navegación que prescinde de la percepción de los sentidos del piloto, y se vale de la instrumentación para orientarse al destino. Cabe señalar que, para la navegación VOR, es necesario siempre contar con la asistencia de un controlador de tráfico aéreo en la estación terrestre del radiofaro. Las reglas de vuelo instrumental son útiles en casos donde la visibilidad es nula por la hora del día, o condiciones climatológicas, por desconocimiento del terreno, o como lo vimos en el artículo pasado, por desorientación en los pilotos.

El radiofaro VOR emite tres señales: La primera es una señal con la instalación terrestre en código morse para identificarse con dicha estación, las otras dos emisiones consisten en ondas senoidales de 30 Hz variables entre sí, una es llamada señal de referencia y la otra señal variable. La señal de referencia mantiene su fase constante, por otra parte, la señal variable modifica su fase según la dirección en la que sea emitida. Cuando el equipo decodificador de las señales VOR en la aeronave recibe las emisiones, este demodula las tres señales, y hace una comparación entre la señal de referencia y la variable, determinando la diferencia de fase entre las dos, y resultando en el conocimiento del radial sintonizado del VOR, y por lo tanto, se conoce con gran exactitud la ubicación en relación al radiofaro emisor y al norte magnético de la tierra.

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Imagen de Stocksnap vía Pixabay bajo licencia Creative Commons.


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